Las redes sociales son un espacio digital en donde podemos interactuar con otros, reflejar nuestras emociones, comunicarnos, conocer nuevas ideas, e incluso, ofrecer un producto o servicio. Facebook, Instagram y Twitter , en general, las redes sociales más usadas a nivel mundial y las que más impacto tienen hoy en día en Internet, se convirtieron en plataformas prodigiosas para alcanzar grandes oportunidades de ventas.
Estas plataformas en línea nos permiten conectarnos con otros perfiles que tengan intereses similares a nosotros, en su mayoría, amigos, compañeros de trabajo, empresas e instituciones.
El inbound marketing ha logrado, que las redes sociales se conviertan en la principal plataforma que utilizan las empresas, para llevar a cabo sus estrategias de marketing relacional. En este sentido, la atención al cliente y la divulgación de contenido de valor, se vuelven tareas esenciales que deben realizar las empresas en redes sociales.
Partiendo de este principio de “interconexión”, muchas empresas han consolidado su marca por medio del Internet y propiamente de las redes sociales, sustituyendo en gran parte el uso de medios convencionales de difusión como lo son la televisión, la radio y la prensa.
A través de las redes sociales se pueden compartir encuestas, fotografías, videos y textos relacionados a un producto o servicio, lo cual le ha permitido a las empresas conocer las motivaciones de sus clientes y conoce de igual forma sus opiniones y críticas.
No obstante ¿Qué sucede con aquellas empresas que conocen estos principios, pero no los llevan a cabo de la manera correcta? Entender cuán importante es aplicar algo, no quiere decir que entendamos a ciencia cierta, cuáles son sus mejores prácticas. De esta forma, he aquí una lista de 7 Malas prácticas en redes sociales que llevan a cabo las empresas. Evalúa si no estás cometiendo alguno de las siguientes acciones y piensa cómo puedes revertir tus errores, sin perder tus objetivos de vista.
1. Seguir masivamente a personas con el objetivo de que éstas te den “follow back”
Uno de los principios básicos del inbound marketing es el de segmentar tus compradores potenciales al momento de crear un perfil para empresas en redes sociales. Esto amerita crear un perfil de tu público objetivo que resuma las características de un comprador que pueda relacionarse estrechamente con tu propuesta de valor. Para esta persona, tu producto o servicio debe constituir una idea innovadora.
Si comienzas a seguir deliberadamente personas en las redes sociales en busca de un follow back, puede existir alguna tasa de conversión que asegure un aumento de seguidores por realizar esta técnica, pero realmente estas corriendo el riesgo no sólo de seguir a usuarios que escapen de tu target, sino que también estás atrayendo a personas equivocadas a tu marca. Personas que probablemente nunca se interesen por tu propuesta y que solo te comenzaron a seguir por ser amables y devolver el “follow back”.
Sé muy claro con lo que esperas de tus seguidores y ten presente cuales son tus prioridades al momento de crear redes sociales para tu empresa. Si se trata de obtener oportunidades de ventas, pues busca seguidores que se vinculen con tu idea, sino, no tendría sentido todo el esfuerzo que empleas en en tus estrategias de social media.
2. Usar excesivamente etiquetas
Los especialistas en inbound marketing, recomiendan utilizan cuando mucho, seis (06) hashtags para etiquetar tu imágenes en estas tres redes sociales. Haz una lista que priorice cuáles son las etiquetas que más se identifican con tu organización, resaltando también elementos propios de la imagen.
Descubre también cuales son los formatos más apropiados para tu audiencia, es decir, si es mucho mejor utilizar videos, infografías o fotografías con textos. Identifica qué formato te está generando una mayor monetización de tu contenido y se muy preciso con lo que deseas comunicar en las etiquetas. Recuerda que también los hashtags son una técnica de posicionamiento en redes sociales y por supuesto, que no deseas atraer al público equivocado debido a etiquetas equivocadas.
3. Repetir constantemente un contenido
Las personas necesitan nuevos estímulos visuales que puedan generarle experiencias innovadoras. Publicar el mismo contenido todos los días y a la misma hora, adormece el interés de tus clientes. Para evitar esto, puedes tener una estrategia de contenido en especifica pero con formatos y mensajes claves diferentes para lograrlo. Crea un calendario de publicaciones y visualiza cuáles son tus próximos pasos a seguir durante todo el mes.
Pregúntate cómo quieres que se vea tu perfil y hazlo posible. En algunas redes sociales varía el tiempo “permitido” en el que puedes repetir un contenido, como es el caso de Twitter en el que algunos links (sobre todo los promocionales) pueden ser más veces publicadas sin alterar mucho la sinergia de la red social.
4- Olvidar responder mensajes y comentarios
Las redes sociales representan tu máxima plataforma de atención al cliente. Debes mantenerte atento a las bandejas de entradas o mensajes directos de tus perfiles, ya que al no hacerlo, puedes estar perdiendo una poderosa oportunidad de conectar con tus clientes. Hazles saber que pueden contar contigo cada vez que te necesiten inclusive ser asertivo si se trata de críticas o recomendaciones. Recuerda que los clientes, deben jugar siempre un papel protagónico en tu modelo de negocio.
5. No adecuar tu contenido a las especificaciones de cada red social
Visualiza cada red social como una fiesta. Cada reunión social tiene sus normas, etiquetas, lenguaje, duración de encuentro y temas de conversación sobresalientes. Así funciona Facebook, Twitter e Instagram. Estas redes poseen objetivos diferentes, en cuanto a formas de comunicar un mismo mensaje.
Por ejemplo, en Instagram y Facebook es recomendable colocar textos que no excedan las 250 palabras, si logras atrapar a tu lector en esas pocas líneas, has logrado adaptar un contenido de valor para el consumo masivo. De esta forma, ten presente cómo debes comunicarte a través de cada red social y los formatos más adecuados para cada una de ellas. Twitter por ejemplo, es una plataforma idónea para visualizar vídeos, marcar temas tendencias y mantener informado a todas las personas de los sucesos del momento. Ten eso presente y adecua tu contenido a cada espacio digital.
6. Escoger una agencia de marketing que no entiende tus ideas
Las agencias de marketing representan grandes aliados al momento de querer buscar ayuda profesional para tener un mayor alcance en redes sociales. Estas compañías usualmente se encargan de idear un concepto para tu marca, crearte la gráfica que acompañe a ese concepto y la gestión de publicaciones en Facebook, Twitter, Instagram, LinkedIn, entre otros.
En este sentido, escoger una agencia de marketing que entienda realmente que es lo que quieres lograr con tu empresa, es vital para materializar íntegramente tus ideas. Escoge una agencia cuyos valores se vinculen con los tuyos y que todo sus trabajos con los distintos clientes con los que se relaciona, tengan un toque personalizado y diferente.
7. No estudiar a tu competencia, ni el mercado
Entender qué está ocurriendo en tu entorno digital es vital para que descubras cuales son las estrategias de marketing que está llevando a cabo tu competencia. En este sentido, reconocer las tendencias y las actualizaciones de cada plataforma, se convierte en una práctica necesaria que cualquier especialista en social media debe llevar a acabo. Realizar un benchmarking con estos objetivos, te permitirán comparar tus resultados con los de otras organizaciones.
Estos estudios de mercado son importantes para resaltar cuales son las necesidades que prevalecen en tu audiencia y que tu competencia no puede resolver. Nada pierdes en encontrar empresas que se relacionen con tu público objetivo y ofrezcan servicios similares a los tuyos, con la finalidad de analizar su lenguaje. ¿Le es efectivo? ¿Qué aspectos le cambiarías? ¿Qué cosas puedes aprender de ellos?
Para finalizar, no cabe duda que éstos errores son muy comunes hoy en día en redes sociales. La clave se encuentra en seguir de cerca cómo ha sido tu receptividad en estas plataformas sociales y cómo tu empresa encaja perfectamente con esos potenciales clientes construidos. Se trata de corregir estas prácticas incorrectas a tiempo y ejercer, una solución rápida, efectiva y sobre todo, en consonancia con tus motivaciones como empresa.