El quiet quitting (renuncia silenciosa) es un fenómeno en crecimiento que afecta a las personas en diversos aspectos de sus vidas, especialmente en el ámbito laboral. Esta forma engañosa de desconexión puede tener efectos perjudiciales sobre la felicidad personal, el crecimiento profesional y el bienestar general. En este artículo, exploraremos su concepto (también conocido como renuncia silenciosa) y 11 estrategias para prevenir el quiet quitting.
Qué es el quiet quitting
El quiet quitting ocurre cuando los empleados pierden interés, pasión y compromiso con su trabajo, pero no expresan su insatisfacción ni renuncian. En cambio, solo hacen lo mínimo indispensable para cumplir con sus responsabilidades mientras mentalmente se desconectan de sus roles.
Los empleados que practican el quiet quitting siguen cumpliendo con sus tareas principales, pero son menos propensos a participar en comportamientos conocidos como “comportamientos de ciudadanía”: ya no se quedan hasta tarde, no llegan temprano ni asisten a reuniones no obligatorias.
A primera vista, esto puede parecer manejable. Después de todo, estos empleados no se están desconectando de sus tareas principales, simplemente se niegan a ir más allá de ellas.
Sin embargo, para muchas empresas, contar con una fuerza laboral dispuesta a hacer más de lo necesario es una ventaja competitiva clave.
La realidad es que la mayoría de los trabajos no pueden definirse completamente en una descripción formal o contrato, por lo que las organizaciones dependen de que los empleados se esfuercen para cumplir con las demandas según sea necesario.
Además, aunque ir más allá de lo esperado puede tener un costo para los empleados, en una organización saludable, estos costos suelen ser compensados por beneficios como un mayor capital social, bienestar y éxito profesional.
Si no se aborda adecuadamente, el quiet quitting puede tener graves consecuencias para tu negocio, como:
- Menor calidad en los resultados
- Pobre satisfacción del cliente
- Mayor rotación de personal y costos de reclutamiento
- Reducción en la creatividad e innovación
- Menor moral y trabajo en equipo
Eso no es todo. El quiet quitting también puede sobrecargar a otros empleados o miembros del equipo, quienes pueden tener que asumir las responsabilidades de los empleados desconectados.
11 Formas de prevenir el quiet quitting
Aquí tienes 11 formas de prevenir que tus empleados adopten el quiet quitting:
1. Mantén los aumentos de carga laboral a corto plazo
Trabajar continuamente al máximo de capacidad o más allá no es sostenible a largo plazo. Los empleados necesitan días libres para descansar y desconectarse mentalmente, así como tiempo personal para conectarse con sus seres queridos. La mayoría de los empleados no se oponen a trabajar horas extra de vez en cuando, pero cuando esta disposición se abusa y un favor se convierte en norma, surgen problemas.
Si pides a los empleados que asuman responsabilidades adicionales, comprende que estás cambiando el acuerdo operativo. El aumento debe ser temporal y, idealmente, opcional. Si el empleado debe asumir estas nuevas tareas indefinidamente, entonces la nueva carga laboral debería ser parte de un ascenso oficial o conllevar incentivos adicionales. De lo contrario, les quitas autonomía a los empleados y los fuerzas a aceptar un acuerdo que difiere del rol que aceptaron cuando comenzaron el trabajo.
2. Compensa adecuadamente a tu equipo
Las disparidades salariales son una de las principales causas del quiet quitting. El problema no es necesariamente que los empleados no estén dispuestos a hacer trabajo extra, sino que sienten que las recompensas probables no valen el esfuerzo adicional. Los gerentes pueden insinuar un aumento que nunca se materializa, o peor aún, se niegan a reconocer el trabajo adicional o a hablar sobre la compensación, diciéndoles a los empleados que “se aguanten” o que “sean jugadores de equipo”.
Cargar tareas adicionales sin el consentimiento del empleado puede sentirse como una violación del acuerdo laboral y del trabajo para el que el miembro del equipo fue contratado. Los empleados a menudo se sienten aprovechados y pueden pensar que la empresa está tratando de exprimir todo el trabajo gratis posible. Un intercambio justo de trabajo por compensación es fundamental para mantener la confianza del empleador. Sin recompensas apropiadas por el esfuerzo extraordinario, el empleado probablemente se sentirá menos valorado.
3. Haz que asumir responsabilidades adicionales sea opcional
No todos los empleados tienen las mismas ambiciones profesionales o desean asumir responsabilidades adicionales. Los cambios en la carrera deben ser conversaciones bidireccionales. En lugar de asumir que los empleados quieren escalar en la jerarquía corporativa o están listos para nuevos desafíos, evalúa cómo se sienten respecto a expandir su rol. Es posible que tu equipo tenga una visión de su futuro diferente a la que esperas. Puedes ofrecerles oportunidades adicionales y alentarlos a probar nuevas tareas, pero no debes forzarlos a asumir roles de liderazgo, especialmente si vienen con nuevas responsabilidades pero sin un título oficial, influencia o pago adicional.
4. Escucha a tus empleados
El quiet quitting no comienza de manera silenciosa. A menudo, los empleados expresan preocupaciones que los gerentes reconocen pero no solucionan o ignoran por completo. Los miembros del equipo que sienten que sus gerentes son ajenos o apáticos ante sus problemas pueden tomar medidas al dejar de actuar. Peor aún, estos empleados pierden la confianza en sus líderes.
Escuchar a tus empleados y validar sus sentimientos y experiencias puede ser de gran ayuda para evitar que los miembros del equipo se desconecten. La empatía es una herramienta poderosa en la lucha contra el quiet quitting. Cuando los empleados sienten que los entiendes y tienes en cuenta sus intereses, es menos probable que se desvanezcan en segundo plano.
5. Establece los límites
El quiet quitting permite a los empleados establecer límites y evitar que compañeros de trabajo o gerentes invadan su tiempo personal. Antes de que los empleados recurran a esta reacción extrema, tú puedes reforzar esos límites en su nombre.
Por ejemplo:
- Enfatiza que responder correos o llamadas fuera de horario es opcional.
- Introduce un sistema de guardias para responder a emergencias.
- Desarrolla un sistema para marcar los mensajes como urgentes y define qué constituye una emergencia fuera de horario.
- Recompensa a los empleados que se queden tarde permitiéndoles salir temprano otro día.
- Intervén cuando los compañeros de trabajo presionen a otros para sobrecargarse de trabajo y crea una manera segura para que el personal pueda reportar estas situaciones.
- Otorga días personales pagados de manera aleatoria.
Abogar por los empleados puede ser una forma altamente efectiva de prevenir el quiet quitting. Cuanto más vocal seas como líder en defender el derecho de tus empleados a tener tiempo privado, menos probable será que los miembros del equipo traspasen esos límites. Los empleados te agradecerán por estar de su lado, y al hablar en su nombre, les evitarás el estrés de tener que confrontar estos problemas directamente.
6. Sé claro sobre los ascensos
Una queja común de los empleados que practican el quiet quitting es que terminan haciendo mucho más de lo que fueron contratados para hacer. La realidad de un mundo empresarial en constante cambio es que la mayoría de los puestos evolucionan más allá de la descripción del trabajo inicial, especialmente en las startups. No es raro que las posiciones amplíen su alcance con el tiempo. Sin embargo, cuando estos cambios ocurren poco después de la contratación o son drásticos, los empleados pueden sentirse sorprendidos.
Una forma de prevenir que los empleados sientan que les cambiaste el acuerdo inicial es ser transparente acerca de los ascensos durante la etapa de la entrevista. Por ejemplo, puedes mencionar que, con el tiempo, visualizas que el puesto se expanda para incluir diferentes responsabilidades. Discutir esta posibilidad desde el principio te permite gestionar expectativas y encontrar a un candidato que esté cómodo con ese crecimiento.
7. Emplea estrategias de reconocimiento de empleados
Los empleados que practican el quiet quitting suelen sentirse infravalorados. Cuando su trabajo pasa desapercibido o no es elogiado, sienten que podrían dejar de esforzarse sin que la dirección se diera cuenta o le importara, y muchas veces tienen razón. En otras palabras, los empleados piensan: “si a nadie le importa de ninguna manera, ¿por qué intentarlo?”.
Las estrategias de reconocimiento de empleados son una excelente herramienta para combatir esta mentalidad. Al reconocer y premiar a los empleados por su trabajo destacado, les muestras que lo que hacen importa tanto para ti como para la organización. Además, los empleados que reciben visibilidad y reconocimiento son menos propensos a desconectarse y desaparecer en segundo plano.
8. Construye relaciones y genera confianza
El quiet quitting es el resultado de una desconexión entre los empleados y los empleadores. Construir relaciones y generar confianza con los empleados es una forma de cerrar esta brecha. Los miembros del equipo que sienten que sus jefes son seres humanos, y no solo figuras de autoridad o entidades sin rostro, tienden a sentir un mayor sentido de compromiso con su trabajo.
Estos empleados tienen más probabilidades de expresar su insatisfacción, lo que permite a los líderes resolver el problema antes de que se convierta en una desconexión silenciosa. Fomentar lazos sociales sólidos entre los empleados y sus compañeros de trabajo, así como con la gerencia, puede motivar un sentido de deber y evitar decepcionar a los colegas.
9. Monitorea los cambios de humor y comportamiento
Los quiet quitters no son empleados crónicamente de bajo rendimiento, sino más bien altos rendimientos desilusionados. Si tus superestrellas comienzan a retraerse, toma nota. Una disminución repentina en la productividad o el entusiasmo puede ser una señal de advertencia de que hay problemas en el horizonte. Si los empleados que antes eran vocales se vuelven callados en las reuniones o los contribuyentes clave de repente dejan de destacar, investiga para encontrar la causa raíz.
Este comportamiento no siempre indica un quiet quitting, ya que el empleado podría simplemente necesitar un descanso para recargar energías o estar enfrentando dificultades personales. De cualquier manera, es importante estar al tanto del estado de tus empleados y vigilar si actúan de manera inusual.
10. Apoya el bienestar de los empleados
Muchos empleados ven el quiet quitting como una medida necesaria para proteger su salud mental. Sin embargo, este paso puede ser innecesario si los empleadores abordan proactivamente las necesidades de sus trabajadores. Cuando priorizas la salud mental, física y emocional de tus empleados, ellos sienten menos necesidad de defenderse de posibles daños retirándose profesionalmente. Idealmente, deberías ser un aliado de tus empleados, no una amenaza para su bienestar.
Al enfatizar tu compromiso con el bienestar de los empleados y tomar medidas para respaldar esas promesas, estableces el lugar de trabajo como un espacio seguro, lo que ayuda a tus empleados a ser completamente ellos mismos y a aprovechar todo su potencial mientras están en el trabajo.
11. Fomenta los descansos y un crecimiento sostenible
El trabajo tiene altibajos, y los empleados necesitan descansos y oportunidades para recargar energías. Una ligera disminución en la productividad no es motivo de alarma. Solo cuando la complacencia se convierte en norma surge un problema. Existe un punto intermedio entre el quiet quitting y el esfuerzo constante. De la misma manera, hay un equilibrio entre el éxito y el agotamiento.
Para evitar que los empleados consideren el quiet quitting, fomenta los descansos y el crecimiento sostenible. Puedes establecer metas razonables que desafíen a los empleados sin abrumarlos, y empoderar a tu personal para que tomen tiempo para descansar en lugar de darse por vencidos.